Las
ofertas para viajar a ese destino que hace tanto queremos conocer o que nos genera una gran curiosidad, son algo así como encontrar un premio debajo de una tapita de gaseosa o aquella figurita difícil de los álbumes de nuestra infancia. Nos provocan esa sensación de alegría, de que es posible seguir jugando y dejar atrás las excusas que nos inventamos de grandes.
Muchas veces el ahorro se nos vuelve en contra y terminamos desaprovechando verdaderas oportunidades de viajes y aventuras tan...
Continuar leyendo